El cambio de paradigma
Los ciudadanos están dejando de ser espectadores pasivos sometidos a lo que los medios de comunicación tenían a bien presentarles, contenidos generalistas dominados por el entretenimiento. Ello era consistente con un modelo de negocio que perseguía mantener a los espectadores enganchados el mayor tiempo posible al medio (TV, radio, periódicos…) para “monetizar” dicha situación vía publicidad.
Cada vez más, los medios de comunicación NO son primordialmente medios de información, sino de entretenimiento. Más o menos veladamente, los propios contenidos de “información” política, económica, deportiva, sentimental…. son en realidad “shows” destinados a entretener, incluso planteando artificialmente y a través de un moderador controversias entre los tertulianos con el fin de prolongar el interés de la audiencia… Aquellos (pocos) ciudadanos que busquen una información más rigurosa, que la encuentren en medios especializados (y minoritarios).
Las nuevas tecnologías digitales están propiciando una brecha en relación con los espectadores más jóvenes y usuarios intensivos de las mismas, en concreto de los menores de unos 35 años. Estos parecen ser mas dispersos e inconstantes, mas inconformistas y determinados, al menos los de mayor poder adquisitivo, a ver contenidos enfocados a sus gustos y sin publicidad, pues como usuarios de plataformas de pago como Amazon, aceptan mejor el acceso a contenidos de pago como Netflix, HBO, Amazon Premium… Esto viene también muy unido al éxito comercial de nuevos productos empaquetados en la forma de series, de producción muy atractiva.
Como consecuencia de ello, los modelos de negocio tradicionales de los medios de comunicación están fatalmente en cuestión, por la fragmentación de las audiencias y consiguiente disminución de los ingresos por publicidad.
La intoxicación informativa, la infoxicación, la posverdad y los populismos
La multiplicación de fuentes de información en el nuevo entorno digital, así como el propio ritmo acelerado de vida, implica que todos queramos estar puntualmente informados de lo último, de lo nuevo. El primero en lanzar una noticia “ocupa el terreno”, se acepta que lo comunicado es cierto (y más aún en contexto de que una parte relevante de las audiencias está anclada a fuentes de comunicación con sensibilidad “afín”). Resulta complejo para cualquier otro medio cambiar el signo de la noticia. Todo esto dificulta enormemente el rigor de las noticias.
A dicho decaimiento en rigor e independencia le afecta la crisis del periodismo como profesión (por la crisis de las propias empresas del sector ante el hundimiento de los ingresos).
Los nuevos modelos de negocio para los medios de comunicación en el entorno digital fomentan la maximización del número de clicks, el número de enlaces visitados, cualquiera puede publicar casi lo que quiera y desde cualquier lugar del planeta, no se puede exigir responsabilidad por los errores en lo publicado…errores que pueden ser de diversos tipos: por un lado, por falta de comprobación suficiente de las noticias, pero también puede darse la propagación consciente de información falsa. Y como lo relevante es maximizar el número de clicks, proliferan los robots que trasmiten mensajes de forma automática para lograr los objetivos de impacto estadístico perseguidos (bots).
Las redes sociales facilitan la conformación de narrativas, el comunicar lo que se sabe que la gente quiere oír, mensajes emocionales, en definitiva, comunicar a los ya convencidos, a los forofos. El populismo se apoya y a la vez refuerza el sentimiento de pertenencia a un grupo.
Quien detenta y lidera el poder en los medios de comunicación
Actualmente y en España, no cabe hablar de fidelidad política específica de los dueños de los principales medios de comunicación. Sus ingresos dependen de la publicidad, que a su vez depende de las audiencias…. Y, en todo caso, se guían más por las expectativas de quien tiene más opciones de acceder al poder en el futuro. Se guardan la opción de pedir en su momento la devolución de favores, vía concesión o renovación de licencias, …
Tradicionalmente, el poder a través de la generación de noticias (y plataforma para la conformación de narrativas) se generaba a través de las grandes agencias de noticias, o grandes grupos multimedia como Prisa, en un rol como de intermediación o agregación. Actualmente, las noticias llegan de forma mas directa desde la fuente o por las redes sociales (Facebook en USA tiene una audiencia del 65% en noticias, Microsoft, Yahoo…).
Los medios más importantes suelen tener una variedad de cadenas de televisión, radio, prensa, diversificadas y de distinto signo para cubrir las principales eventualidades. Así pues, en España los grupos Atresmedia y Mediaset, con un 60% de la audiencia y un 80% de los ingresos publicitarios, tienen 8 canales cada uno, dedicados a canal generalista, para mujeres, para hombres, infantil…. que solamente la utilizaría con el permiso expreso de cada cliente.
Reseñar finalmente la tendencia reciente al agrupamiento colegiado de medios para analizar y publicar determinadas informaciones complejas y con gran necesidad de recursos de investigación, por ejemplo, los “papeles de Panamá”, la “lista Falciani”, los papeles de “Wikileaks”…
Cómo afinar más, la medición de audiencias y más para mejorar el conocimiento de las mismas
Como usuarios, facilitamos muchísima información (sobre gustos e intereses, deportes, coches, información económica, sentimental, sobre viajes…) de forma desperdigada, en redes de mensajería, en redes sociales… las nuevas aplicaciones de “Big Data” pueden tener mucha utilidad para sacar partido de ello, siempre que las distintas regulaciones lo permitan y se apliquen. En ese sentido, Telefónica Movistar anunció hace meses una iniciativa pionera en su sector mediante la creación de una plataforma que unificara todos los datos de cada cliente, y comercializarlo solo en caso de autorización expresa de cada cliente.
Enhorabuena Javier. Estupendo artículo. Un abrazo
Gran reflexión Javier. Algún compañero me dijo que lo que dispara las audiencias sigue siendo la "caja tonta". Presente en lugar de honor en todos los salones, cocinas y cada vez menos en dormitorios, sigue siendo el medio seguramente más influyente, porque es audiovisual y es el que más permea a cualquier estrato de la población. Como bien citas, a traves de programas que siempre tienen una nota de entretenimiento o espectacularidad innecesaria a veces conectan con los sentimientos de poblaciones segmentadas por canales de TV. El problema es que la gente cada vez busca menos información objetiva, rigurosa, exenta de alharacas y anuncios, porque hay que pagarla y pocos están dispuestos.
Lo siento, no estoy de acuerdo con la afirmación,"la gente cada vez busca menos información objetiva y rigurosa". Lo que voy a comentar a continuación, por supuesto, está basado en mi propia experiencia y no se si se podría considerar como genérico. El día tiene 24 horas, tenemos que comer, dormir, trabajar, etc con lo cual tenemos un tiempo limitado para estar informados rigurosamente. Hoy tenemos a nuestra disposición un mar inmenso de "DATOS IMPRECISOS" que nos llegan a través de los móviles, radios, TV, internet y esto hay que codificarlo ordenarlo y separar el grano de entre la muchísima paja. No tenemos tiempo para eso, creo que esta labor sería la que tendría que desempeñar el periodismo que pretende ser serio y riguroso. Pero, desde mi punto de vista a lo que se dedican es a añadir mas "DATOS IMPRECISOS" a través de tertulias (tv y radio) donde escuchamos a un grupo de periodistas opinar, opinar, opinar, de todo sin ningún tipo de rigor. Son una casta de charlatanes que solo saben opinar pero no aportan nada de información. En cuanto a redes sociales no hay por donde cogerlo.
Creo que en una sociedad cada colectivo tiene su misión, un doctor nos opera y dentro de la maraña de órganos sabe distinguir lo que tiene o no que extirpar, un constructor con una serie de materias primas desordenadas (cemento, ladrillos,.. ) construye un edificio, un agricultor en una tierra baldía produce alimentos. Pues bien la labor del periodismo actual debería ser sacar el grano y ponerlo al alcance del resto de la sociedad, no existe esta clase de periodismo. En la era de la información resulta que es cuando más desinformados estamos.
Creo que esto genera un peligro importante. La democracia se basa en que cada cuatro años la sociedad tiene que votar a un abanico de opciones políticas y que su decisión sea lo más acertada posible. Para tomar decisiones acertadas lo ideal es tener una buena información si esto es así generalmente las decisiones son acertadas. Hoy no sabemos nadie nada serio y riguroso de quienes nos representan de a que problemas nos enfrentamos y que soluciones proponen para solucionarlos.
Por último una reflexión. Las personas necesitamos alimentar nuestro cuerpo y nuestra mente, al igual que hay alimentos en mal estado y que se retiran de la cadena alimenticia para que no nos produzcan enfermedades, hay alimentos mentales que llevan caducados años y los seguimos consumiendo. ¿Debería haber un control de lo que consumimos mentalmente (imágenes, tertulias, discursos, twist,…). ¿Que es más importante para el ser humano su cuerpo o su mente?.
Gracias Anónimo por su comentario. Respecto del párrafo final, recuerdo que el equilibrio mente/cuerpo ya fue importante para los antiguos. Decir qué podemos consumir mentalmente nos retrotraería a épocas ya olvidadas en Occidente, o a sistemas como el chino donde sus sistemas de acceso a la información no están abiertos (sin ir más lejos la TV3 catalana parece ser un importante influenciador en muchos núcleos rurales en Cataluña). Creo que las personas han de dar un paso de responsabilidad personal y asumir que el reto de lo que consumen mentalmente es mayoritariamente una decisión personal ("si no haces planes para tí, otros los harán para tí"). Tener una especie de gran hermano como en las epocas anteriores era más sencillo, había menos competencia entre medios, pero nos conducía a un consumo de lo que otros querían.
Respecto del resto de su comentario, no veo que su argumento invalide mi afirmación: no estamos dispuestos a pagar por medios veraces e independientes. Y por tanto, consumimos lo que quieren los nuevos medios de comunicación y el poder detrás de ellos.
Lo que quería plasmar con mi comentario es que esos medios veraces e independientes no existen o yo al menos no los conozco. Voy a poner 3 ejemplos de noticias que han sido y serán muy populares y no hay ningún medio que nos ilustre con datos veraces:
EL PRECIO DE LA ENERGÍA. Yo no he escuchado ni he visto plasmado en ningún sitio cuanto cuesta producir un KW de energía eólica, nuclear, fotovoltaica, hidráulica. Si no sabemos lo que cuesta y el impacto medioambiental que tiene cada una de ellas como vamos a saber decidir cual es la mejor o cual es la mejor combinación entre ellas?.
EL RESCATE BANCARIO: En todos los medios siempre se dice esta frase "EL RESCATE A LOS BANCOS". No soy un especialista en el tema pero hasta donde yo se quien nos han costado muchísimo dinero a todos los contribuyentes han sido las CAJAS DE AHORROS, gestionadas por políticos (por cierto de todas las ideologías) y sindicatos. No conozco ningún medio que haya publicado la lista de directivos de dichas cajas con su afiliación política y sindical y lo que nos ha costado a todos su mala gestión.
LA BRECHA SALARIAL ENTRE HOMBRES Y MUJERES. En mi trayectoria profesional he trabajado en varios sectores diferentes y no conozco ni un solo caso que a igualdad de responsabilidad cobre menos una mujer que un hombre. Me gustaría que algún medio diera ejemplos de dicha afirmación.
Usted decía que la gente cada vez busca menos información objetiva y en esto es con lo que no estoy de acuerdo. No es que cada vez busque menos es que cada vez hay más sitios donde buscar y no hay tiempo material para esa tarea, y se opta por dejar de buscar por desesperación.
Yo creo que habría mucha gente dispuesta a pagar por información veraz el problema es que no existe, esa oferta no está en el mercado.
Esto es una intuición, los medios se han contagiado de la inmediatez de las redes sociales, consumen noticias cada hora y la información veraz no es inmediata hay que documentarse, entrevistar a personas que no son famosas pero si están formadas (cada una en su materia), etc, y eso hoy no sirve.
En cuanto a la alimentación mental, estoy totalmente de acuerdo que es una decisión personal y es nuestra responsabilidad pero elegir lo que comemos también lo es y no cualquiera puede producir/vender productos alimenticios.
Creo que las personas a nivel personal somos capaces de tomar decisiones responsables y ser consecuentes con nuestras decisiones pero como colectivo somos muy vulnerables y fáciles de manipular. No creo que tenga que haber censura pero si consecuencias para los medios que mienten y lo hacen sabiendo que lo hacen, igual que hay consecuencias para alguien que conduce bebido o para un restaurante que sirve comida caducada.
No vivo en Cataluña pero no creo que quienes conforman el congreso en Cataluña provengan la mayoría de núcleos rurales.
Reitero, creo que habría mucha gente dispuesta a pagar por información veraz.