Aún a la espera de cerrar los libros candidatos al V Premio Knowsquare al Mejor Libro de Empresa, aparece el libro “El Retorno de los Chamanes”, de Victor Lapuente. El libro se ya ha sido comentado en blogs líderes de opinión como Sintetia y ¿Hay Derecho? y se anticipa como uno de los éxitos editoriales españoles de libros de política de 2015, si no en número de ventas, sí como uno de los autores españoles que aporta pensamiento innovador y comparado en un mundo ampliamente dominado por la literatura anglosajona. No es un libro de empresa al uso, pero su lectura es de utilidad para situar al lector en el contexto que la política crea en la gestión empresarial.
Aborda un pensamiento orientado a la acción práctica concentrada en los resultados tangibles y alcanzables frente a las intenciones de gran cambio de los partidos populistas. Propuestas maximalistas que aunque inconcretas encandilan a muchos votantes – hasta que sus líderes llegan al poder y sus propuestas brillan por su ausencia, o impracticabilidad, como en el caso de la Syriza griega. Reivindica la acción política basada en el consenso, con modelos comprobables en la medida de lo posible en lugares de mejores prácticas, y la autonomía de una función pública profesionalizada en lugar de la simple ejecutoria por imposición de leyes de programas ideológicos.
Es un libro de orientación similar a “Por qué fracasan las Naciones” de Acemoglu y Robinson, 2012, que popularizó el concepto de élites extractivas e inclusivas. Aquí, Lapuente menciona la retórica política como eje clave de su historia, y distingue entre los “chamanes” de la política, los populistas que proponen cambios radicales de modelo, frente a las “exploradoras”, que buscan la forma de resolver los problemas con acciones o políticas concretas y tangibles.
Teoriza sobre las desventajas de la democracia directa frente a la democracia representativa – que funciona en bastantes aspectos en la gestión pública en California con resultados bastante cuestionables, pese a tener Silicon Valley y Hollywood -, e incluso elogia sistemas poco democráticos como Singapur que bajo Lee Kuan Yew, han elevado a niveles record la renta percápita y las posibilidades de su población. Singapur compartía una renta percápita similar a Jamaica en 1960, unos $2500 dólares. Singapur tiene ahora $43560 dólares frente a $3600 dólares en Jamaica, que se sumió en el populismo de Norman Manley por las mismas fechas.
Su aportaciones son interesantes, especialmente en un momento donde la globalización y las transferencias de poder generan pérdidas de identidad y son caldo de cultivo para una vuelta a la recuperación de cuotas de autonomía perdidas como solución para los problemas profundos que aquejan a la sociedad. Esa es la pretensión de buena parte de los políticos populistas de la Europa del siglo XXI. Sin al tiempo, en bastantes ocasiones, querer descartar los beneficios que conlleva la pertenencia a la UE.
Profundo conocedor de la historia y evolución de los modelos sociales nórdicos, Víctor Lapuente es profesor del Instituto para la Calidad del Gobierno de la Universidad de Gotemburgo.